martes, 13 de abril de 2010

Resisten ahora y siempre al invasor



Ayer vi a una persona hablando en una cabina telefónica (aunque ya no son cabinas en realidad) y me sorprendió ya que son objetos que han caído, prácticamente, en desuso y por tanto en el olvido.

La llegada y generalización del uso del teléfono móvil hace unos trece años hicieron que cada vez fueran quedando menos. Sin embargo, como unos galos de pro, algunas de ellas resisten todavía y, pese a lo que se pueda pensar, sobreviven a móviles y locutorios ya que si no Télefónica las habría eliminado hace tiempo.

Debo ser muy simple pero me hizo ilusíón ver a alguien hablando por un teléfono público como hacíamos antaño.

Y en una entrada sobre teléfonos públicos no podría faltar un comentario sobre La cabina una extraordinaria película española de los años setenta, mezcla de ciencia ficción y terror, protagonizada por Jose Luis López Vázquez, uno de los mejores actores españoles de la historia.

9 comentarios:

Sir Worth dijo...

La de visitas que le hacía de joven... y tienes razón, desde que salió el móvil al mercado, es raro ver a alguien usándolas.

En cuanto a la película, qué decir que ya no se haya dicho. Impagable.

Sonix dijo...

Pues yo creo que por donde me muevo nunca veo cabinas telefónicas, excepto alguna perdida por ahí. No sé qué criterios utilizan para dejarlas o no donde están. Pero es una caña, porque no hace tanto todos teníamos que utilizarlas para todo, y ahora nos extraña verlas. ;D

sonia dijo...

Todavía queda alguna por aquí por Zaragoza??? Me refiero a estas de las puertas. Recuerdo que dos que había en mi barrio estaban siempre con los cristales rotos, algún capullo que se entretenía en romper siempre los cristales.
Tan acostumbrados estamos al móvil ahora que las pocas cabinas que quedan nos pasan desapercibidas.

Mr. Le Mans dijo...

La de gamberradas que han sufrido a lo largo de la historia. Si dejan alguna será, sin duda, toda una superviviente.

alcorze dijo...

En Zaragoza no queda ninguna que yo sepa pero voy a investigarlo. El otro día creo que vi una de las antiguas pero no estoy seguro de si es un recuerdo que me ha venido ahora o me lo estoy imaginando.

Angelillo dijo...

En mi barrio había una, y creo que sigue pero transformada a cabina moderna, de las que son dos, una dando la espalda a otra, pero sin cristales alrededor. Como ya no aparco por allí, ni me acuerdo si siguen (creo que sí). Ahora las usan los extranjeros para llamar a su país.
El concepto cabina es ya nostálgico u ochentero, como los vinilos, mandar al niño a por tabaco o vino, jugar en el parque sin temor a ser raptado o las coderas y rodilleras en la ropa. Aquellos maravillosos años...

:::::: dijo...

Aquí en México ya casi no hay de ese tipo de cabinas, es más, no las hay, no he visto ninguna.
Y bueno, me anoto la peli que nos recomiendas!
Besos, querido Alcorze

Gabriel Bornes dijo...

Tengo que reconocer que en una epoca de mi vida, economicamente muy mala, yo estafaba esos telefonos con monedas antiguas que le hacían perfectamente.

Incluso joder al sistema cuesta cada vez más en la actualidad.

Ya no hay mucho espacio para lo artesanal.

Salud.

Athman dijo...

Aqui en Lleida apenas quedan un par, que yo sepa y ademas, son del modelo nuevo, abiertyo y sin puertas. Una simple cubierta pra el aparato y ya.
Recuerdo cuando veiamos a algun abuelete mirando en la casilla del cambio, por si encontraban alguna monedilla suelta.
La pelicula es una gozada,amigo Alcorze... Creo que es un film de obligada visualizacion.
Saludos.