Todos los días suelo salir de casa a las siete y cuarto de la mañana para ir a trabajar.
Voy siempre caminando ya que tengo un trayecto bastante corto de unos diez minutos. Es lo que tiene vivir y trabajar en el centro ;) aunque pronto es posible que deje de serlo... pero eso es tema para otro momento y otra entrada.
El caso es que ninguna mañana dejo de asombrarme de la cantidad de inconscientes que van circulando por ahí. En concreto me refiero a los ciclistas que van por la calzada (que es por donde deberían ir todos) sin ningún tipo de reflectante, chaleco o iluminación de ningún tipo.
Si tu vas conduciendo un vehículo a motor, es realmente difícil, a esas horas en que todavía es de noche, distinguir a un ciclista en la calzada. No todas las calles de la ciudad tienen la suficiente iluminación o visibilidad para ver a una persona en bici.
En fin, poneros un simple chaleco reflectante y una luz delante, que con eso es suficiente para veros.
Y como banda sonora de este post "Join the Army" un temazo de los Suicidal Tendencies
8 comentarios:
"pronto es posible que deje de serlo"
¿Sí?? Pues a ver si hay suerte!! ;D
Yo la verdad es que también me asombro de la cantidad de temerarios que hay por la carretera. En la gente que va dentro de un coche se podría entender más, pero los ciclistas y los peatones, que si se llevan un golpe no tienen nada que les proteja... en fin. A veces no pasan más cosas por pura suerte, me imagino.
Te doy la razon completamente, creo que es de obligado cumplimiento que si van por la calzada lo lleven no?
Un saludo
Coincido plenamente contigo. El riesgo a esa hora se multiplica considerablemente. Recuerdo haberme llevado un susto de muerte este verano, cuando a la puesta de sol, En Alcalde Caballero dirección Salvador Allende a la altura del polígono Molino del Pilar con el sol completamente de cara y deslumbrado, casi me llevo puesto a un ciclista sin ningún tipo de iluminación.
Sí, no pasan más cosas porque no tienen que pasar. Por aquí, además del asunto que comentas sobre los ciclistas, he observado cómo los peatones hacen un buen uso de los pasos de cebra regulados por semáforos, incluso cuando se están aproximando a los mismos ambulancias, camiones de bomberos o coches de la policía, con sirenas y luces encendidas. He visto un par de atropellos en estas circunstancias. Si en condiciones normales hay que andarse con mil ojos para cruzar un paso de peatones... pues eso, que podríamos calificar estas actitudes con el título de la entrada.
Saludos.
Es cierto, creo que puedo contar con los dedos de una mano la gente que he visto con chaleco reflectante en bici, y más a esas horas.
Entre ciclistas y peatones es para echarse a temblar.
Es que es eso. A mí me da miedo el ver cómo circulan algunos ciclistas (aunque es extrapolable también a conductores y peatones) por el daño que pueden sufrir y porque la persona que los atropelle (o casi) se lleva también un grandísimo susto o disgusto con consecuencias que es aún peor.
Ya viste el espabilado ese de la moto que se mató el otro día en Valle de Broto por ir haciendo el gilipollas. Menuda faena para el hombre del camión.
Ese mismo día, iba en el coche por la avenida de la academia general y de repente veo que debajo del puente de la autopista, por mi carril uno que iba en moto se bajó de ella la tiró en medio del carril y echó a andar hacia la contra. Menos mal que lo vimos con tiempo que si no nos comemos la moto que había dejado ahí tirada.
tienes toda la razón, yo intento evitar coger la bici por la noche o cuando todavía está oscuro.Poner una luz delante y otra detrás no cuesta nada... y só lo del chaleco y el casco también se debería de tomar como norma.
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